Dogecoin, creada como una broma en 2013, se ha transformado en una criptomoneda significativa, valorada en 22,6 mil millones de dólares para 2025. Su fuerte comunidad, bajos costes de transacción e impacto cultural, notablemente influenciado por Elon Musk, han contribuido a su ascenso y dominio como meme-coin. Los críticos cuestionan su utilidad, pero sigue siendo un símbolo de la fuerza de la comunidad y la cultura de internet.