La emisión de bonos estadounidenses a corto plazo y sin intereses se acerca a niveles históricos, lo que demuestra que la crisis de deuda de Estados Unidos se está agravando cada vez más.

El 9 de diciembre, según informó The Kobeissi Letter, en los últimos 12 meses el Departamento del Tesoro de Estados Unidos ha emitido un récord de 25,4 billones de dólares en letras del Tesoro (T-Bills; nota: los T-Bills son bonos a corto plazo, con vencimiento igual o inferior a un año, emitidos por el Tesoro de EE. UU. y sin cupón de interés), lo que eleva el total emitido por el Tesoro a un récord de 36,6 billones de dólares. Esto significa que actualmente los T-Bills representan el 69,4% del total de la deuda emitida por Estados Unidos, acercándose a máximos históricos. Esto implica que el gobierno estadounidense está utilizando cada vez más deuda que vence en unos pocos meses para financiar su deuda a largo plazo. Por lo tanto, el gasto en intereses de la deuda pública ahora se mueve prácticamente en sincronía con la tasa de política de la Reserva Federal. Si la inflación repuntara y la Fed se viera obligada a subir los tipos de interés de nuevo, el coste de los intereses alcanzaría niveles sin precedentes. La crisis de la deuda estadounidense se está agravando.