¿Alguna vez te has planteado esta pregunta: por qué tanta gente está dispuesta a asumir enormes riesgos solo para meterse en el mundo de las criptomonedas?

Voy a ser claro: en la mayoría de estos llamados proyectos descentralizados, el control sigue estando en manos de grandes inversores y KOLs. Ellos pueden manipular los precios gracias a la asimetría de información y su ventaja financiera. Todos lo sabemos, no hace falta engañarse. Pero aun así, ¿por qué el Web3 y las finanzas descentralizadas siguen siendo imparables?

La respuesta está en las frustrantes limitaciones de las finanzas tradicionales:

Te congelan la cuenta sin darte una razón decente. ¿Quieres sacar tu propio dinero? Lo siento, hay límites y además tienes que presentar un montón de papeles absurdos. Y lo más increíble: si un empleado del banco malversa fondos y hay problemas, la culpa siempre es del "becario temporal", como si el banco no tuviera nada que ver. Incluso al hacer una transferencia a un amigo, te la pueden bloquear diciendo que la cuenta de destino es "de riesgo". ¿Y qué decir de invertir o transferir dinero al extranjero? Eso ya es prácticamente imposible, la mayoría ni siquiera cumple los requisitos para abrir una cuenta.

Después de vivir todas estas situaciones, la gente se da cuenta: ¡el dinero hay que controlarlo uno mismo!

Por eso surgieron las wallets descentralizadas, blockchain, DeFi y todos esos proyectos cripto… Todo eso va dirigido a "devolver el control financiero al usuario".

Pero ojo, que el mercado está lleno de proyectos de todo tipo, y no faltan los que intentan aprovecharse. Hay que saber distinguir entre lo que tiene base real y lo que es puro humo; no te dejes engañar. Si no lo entiendes, investiga más o pregunta a alguien de confianza, y al final plantéate: ¿tengo la capacidad de participar en esto?

No te dejes llevar por el entusiasmo y te metas de cabeza, porque si luego ves cómo el precio de tu token se va a cero, no habrá a quién llorarle.