Las solicitudes de quiebra corporativa están en camino de alcanzar su nivel más alto en 15 años. Sin embargo, seguimos escuchando sobre "incidentes aislados" por parte de funcionarios y analistas.

¿Cuándo deja un patrón de ser aislado? Los datos cuentan una historia diferente a las narrativas tranquilizadoras. Los casos del capítulo 11 se están acumulando en diferentes sectores: el retail sufriendo, el sector inmobiliario comercial sangrando, incluso algunos nombres de tecnología tambaleándose.

Esto también importa para los inversores en criptomonedas. Cuando las finanzas tradicionales muestran grietas, los flujos de capital cambian. El apetito por el riesgo cambia. Lo que parecía ser fracasos aislados comienza a conectarse en un panorama más amplio de estrés económico.

La comparación de 15 años nos sitúa de nuevo en el territorio de 2009-2010. ¿Alguien recuerda qué pasó con los activos de riesgo en ese entonces? Quizás esos eventos "aislados" no son tan aislados después de todo. Vale la pena observar cómo se desarrolla esto en el segundo y tercer trimestre.