En este tiempo he ajustado la estrategia, ya no me meto en esas cosas complicadas de doble moneda, y también he dejado en pausa los contratos.

La estrategia actual es muy sencilla: cambiar todo a monedas estables y esperar el momento adecuado para apostar todo en BTC. Con el mercado tan volátil, seguir con efectivo es más seguro.

Además, destinar una parte de los fondos a USDD para obtener intereses, a decir verdad, el rendimiento es bastante mejor que tener USDT. Hice los cálculos de la anualidad, esta oportunidad de arbitraje de monedas estables es bastante atractiva, al menos mientras espero oportunidades con monedas principales, no dejará que los fondos estén inactivos.