El verdadero camino para la tokenización inmobiliaria no se basa en el comercio especulativo; está fundamentado en flujos de efectivo reales. Piénsalo: pagos de alquiler, distribuciones de dividendos, flujos de ingresos constantes. Eso es lo que separa la infraestructura legítima de RWA del ruido.

Si una plataforma puede clavar la mecánica de la recolección de alquileres y los pagos de dividendos en cadena, están jugando un juego completamente diferente al de los proyectos de RWA impulsados por el hype que hemos estado viendo. Estamos hablando de una distribución de ingresos transparente, flujos de efectivo programables, utilidad real en lugar de promesas vacías.

El espacio RWA necesita este tipo de cambio fundamental. Propiedades que generan retornos verificables, tenedores de tokens que reciben su parte automáticamente a través de contratos inteligentes—ahí es cuando la blockchain realmente agrega valor al sector inmobiliario en lugar de simplemente envolver la especulación en un nuevo paquete.