#数字货币市场调整 20 billones de dólares. Esta cifra es tan grande que resulta inconcebible: el gobierno de Trump planea invertir esta astronómica suma antes de 2025, un monto que ya supera cualquier plan de estímulo económico en la historia de la humanidad.
Para ser honesto, mi primera reacción al ver esta noticia fue: ¿a dónde irá finalmente este dinero?
Los mercados tradicionales aún están a la espera, pero el capital ya ha comenzado a migrar silenciosamente. La reciente colaboración de una de las principales instituciones de gestión de activos globales con un intercambio líder es, en esencia, la construcción de una autopista que conecta dos mundos financieros: en un extremo, una gran cantidad de capital del financiamiento tradicional y, en el otro, el agujero negro de liquidez del mundo cripto.
He organizado tres cambios disruptivos que están ocurriendo:
Hablemos primero de la liquidez. ¿Cuál es el 1% de 20 billones? 200 mil millones de dólares. Debemos saber que el valor de mercado total de toda la criptomoneda ahora mismo es de solo 6-7 billones, y aunque solo una pequeña parte de los fondos fluya, sería suficiente para cambiar el actual panorama de financiamiento. No se trata de un simple juego de números, sino de un torrente de dinero real.
Veamos nuevamente la forma de entrada. Anteriormente, las instituciones que querían entrar tenían que comprar monedas directamente, enfrentándose a riesgos de cumplimiento, o esperar fuera del mercado y perder oportunidades. Ahora, a través de innovadoras herramientas como la tokenización de bonos del gobierno, han encontrado un camino que es tanto conforme como eficiente. Las reglas del juego entre los minoristas y las ballenas están siendo reescritas.
Lo más importante es que la lógica de valoración se está reestructurando. Los activos criptográficos solían etiquetarse como "productos especulativos de alto riesgo", pero cuando enormes cantidades de dinero del mundo tradicional encuentran su entrada, se están convirtiendo en "una opción imprescindible para la asignación de activos". Ese modelo de valoración que se ha utilizado durante décadas podría realmente estar a punto de fallar.
El dinero inteligente ya ha comenzado a actuar: la posición institucional de Bitcoin aumentó un 23% en una semana, los contratos de futuros de Ethereum alcanzaron un nuevo máximo anual en posiciones abiertas, y el TVL de los protocolos DeFi regulados creció silenciosamente un 47%.
Pero la crisis también se está gestando en las sombras. Es muy probable que la volatilidad a corto plazo se dispare, el espacio gris para la evasión regulatoria se está reduciendo y la brecha de información entre las instituciones y los inversores minoristas se ampliará aún más. Estos son puntos de riesgo que deben ser vigilados.
Mi juicio es: el núcleo de esta ronda de mercado no es "el aumento explosivo", sino "la revaluación del valor". Cuando una gran cantidad de capital del mundo tradicional ingresa, todo el sistema de valoración del mercado será derribado y reconstruido.
Tres enfoques para considerar: enfocar la asignación en activos amigables con las instituciones, prestar atención a los proyectos de infraestructura regulada y mantener suficiente liquidez para enfrentar fluctuaciones severas.
Cuando la ola de 200 billones de dólares realmente llegue, ¿elegirás ser el surfista aventurero, el observador en la orilla, o el francotirador preciso?
Seamos testigos de esta migración de capital a nivel histórico. $BTC $ETH
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#数字货币市场调整 20 billones de dólares. Esta cifra es tan grande que resulta inconcebible: el gobierno de Trump planea invertir esta astronómica suma antes de 2025, un monto que ya supera cualquier plan de estímulo económico en la historia de la humanidad.
Para ser honesto, mi primera reacción al ver esta noticia fue: ¿a dónde irá finalmente este dinero?
Los mercados tradicionales aún están a la espera, pero el capital ya ha comenzado a migrar silenciosamente. La reciente colaboración de una de las principales instituciones de gestión de activos globales con un intercambio líder es, en esencia, la construcción de una autopista que conecta dos mundos financieros: en un extremo, una gran cantidad de capital del financiamiento tradicional y, en el otro, el agujero negro de liquidez del mundo cripto.
He organizado tres cambios disruptivos que están ocurriendo:
Hablemos primero de la liquidez. ¿Cuál es el 1% de 20 billones? 200 mil millones de dólares. Debemos saber que el valor de mercado total de toda la criptomoneda ahora mismo es de solo 6-7 billones, y aunque solo una pequeña parte de los fondos fluya, sería suficiente para cambiar el actual panorama de financiamiento. No se trata de un simple juego de números, sino de un torrente de dinero real.
Veamos nuevamente la forma de entrada. Anteriormente, las instituciones que querían entrar tenían que comprar monedas directamente, enfrentándose a riesgos de cumplimiento, o esperar fuera del mercado y perder oportunidades. Ahora, a través de innovadoras herramientas como la tokenización de bonos del gobierno, han encontrado un camino que es tanto conforme como eficiente. Las reglas del juego entre los minoristas y las ballenas están siendo reescritas.
Lo más importante es que la lógica de valoración se está reestructurando. Los activos criptográficos solían etiquetarse como "productos especulativos de alto riesgo", pero cuando enormes cantidades de dinero del mundo tradicional encuentran su entrada, se están convirtiendo en "una opción imprescindible para la asignación de activos". Ese modelo de valoración que se ha utilizado durante décadas podría realmente estar a punto de fallar.
El dinero inteligente ya ha comenzado a actuar: la posición institucional de Bitcoin aumentó un 23% en una semana, los contratos de futuros de Ethereum alcanzaron un nuevo máximo anual en posiciones abiertas, y el TVL de los protocolos DeFi regulados creció silenciosamente un 47%.
Pero la crisis también se está gestando en las sombras. Es muy probable que la volatilidad a corto plazo se dispare, el espacio gris para la evasión regulatoria se está reduciendo y la brecha de información entre las instituciones y los inversores minoristas se ampliará aún más. Estos son puntos de riesgo que deben ser vigilados.
Mi juicio es: el núcleo de esta ronda de mercado no es "el aumento explosivo", sino "la revaluación del valor". Cuando una gran cantidad de capital del mundo tradicional ingresa, todo el sistema de valoración del mercado será derribado y reconstruido.
Tres enfoques para considerar: enfocar la asignación en activos amigables con las instituciones, prestar atención a los proyectos de infraestructura regulada y mantener suficiente liquidez para enfrentar fluctuaciones severas.
Cuando la ola de 200 billones de dólares realmente llegue, ¿elegirás ser el surfista aventurero, el observador en la orilla, o el francotirador preciso?
Seamos testigos de esta migración de capital a nivel histórico. $BTC $ETH