El mercado acaba de presenciar una brutal sacudida. En las últimas 24 horas, las liquidaciones alcanzaron la asombrosa cifra de $1.07 mil millones, siendo las posiciones en largo las más afectadas con $893.65 millones, mientras que las posiciones cortas fueron recortadas en $173.02 millones.

Eso no es todo. Alrededor de 225,733 traders fueron destruidos en esta ola. La asimetría cuenta la historia: los toros fueron aplastados casi 5 veces más que los osos, un signo clásico de optimismo sobreapalancado encontrándose con la realidad.

¿La parte más salvaje? Una única orden de liquidación en HTX acaba de hacer historia: una posición de $44.29 millones en BTC-USDT desapareció de un solo movimiento. Esa es la mayor liquidación aislada registrada en este ciclo.

Este tipo de volatilidad no es ruido. Es un reinicio. Cuando casi un cuarto de millón de cuentas son liquidadas en un día, señala un cambio importante en el sentimiento o el colapso de una casa de naipes apalancada. De cualquier manera, la gestión del riesgo se ha vuelto nuevamente innegociable.