Polígonos. Se trata de lados. ¿Cuántos? Bueno, esa es la gran pregunta.
Empecemos simple. Triángulos. Tres lados. Fácil. Luego tenemos cuadriláteros con cuatro. Los pentágonos tienen cinco lados. ¿Hexágonos? Seis. Se vuelve un poco más complicado después de eso.
Heptágonos y octágonos. Siete y ocho lados. No son tan comunes, pero están ahí. Nonágonos y decágonos completan el top diez. Nueve y diez lados, respectivamente.
¿Más allá de eso? Es un poco un todos contra todos. Simplemente pon "-gon" al final de un número. Dodecágono para doce lados. Funciona.
Ahora, aquí es donde se pone interesante. ¿Regular o irregular? No se trata de la dieta. Los polígonos regulares son todo sobre la igualdad. Lados iguales, ángulos iguales. ¿Irregular? No tanto.
También está toda esta cuestión de cóncavo versus convexo. El convexo tiene todos los ángulos hacia adentro. El cóncavo tiene al menos uno que sobresale. No está del todo claro por qué esto es importante, pero a los geométricos parece que les importa.
Los polígonos están en todas partes. A la naturaleza le encantan. A los arquitectos no les basta. Están en tu bolsillo, en tus paredes. Parece que no puedes escapar de ellos.
Al final, los polígonos son más que solo formas. Son una manera de entender nuestro mundo. Es un poco sorprendente cuán importantes son, en realidad.
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Polígonos. Se trata de lados. ¿Cuántos? Bueno, esa es la gran pregunta.
Empecemos simple. Triángulos. Tres lados. Fácil. Luego tenemos cuadriláteros con cuatro. Los pentágonos tienen cinco lados. ¿Hexágonos? Seis. Se vuelve un poco más complicado después de eso.
Heptágonos y octágonos. Siete y ocho lados. No son tan comunes, pero están ahí. Nonágonos y decágonos completan el top diez. Nueve y diez lados, respectivamente.
¿Más allá de eso? Es un poco un todos contra todos. Simplemente pon "-gon" al final de un número. Dodecágono para doce lados. Funciona.
Ahora, aquí es donde se pone interesante. ¿Regular o irregular? No se trata de la dieta. Los polígonos regulares son todo sobre la igualdad. Lados iguales, ángulos iguales. ¿Irregular? No tanto.
También está toda esta cuestión de cóncavo versus convexo. El convexo tiene todos los ángulos hacia adentro. El cóncavo tiene al menos uno que sobresale. No está del todo claro por qué esto es importante, pero a los geométricos parece que les importa.
Los polígonos están en todas partes. A la naturaleza le encantan. A los arquitectos no les basta. Están en tu bolsillo, en tus paredes. Parece que no puedes escapar de ellos.
Al final, los polígonos son más que solo formas. Son una manera de entender nuestro mundo. Es un poco sorprendente cuán importantes son, en realidad.