Ó pá, déjame contarte una historia sobre esa cosa del hash que está dando que hablar. Mira, yo no entiendo mucho de esto de ordenadores y cosas así, pero por lo que me explicaron, el hash es como una especie de máquina de picar carne, ¿sabes? Metes dentro lo que quieras - puede ser un poquito de texto, un archivo grande, lo que sea - y siempre sale del mismo tamaño por fuera.
Es como si tomaras un libro entero y lo transformaras en una frase cortita. Y lo más curioso es que si cambias una coma en el texto original, ¡la frase que sale es completamente diferente! ¡Parece magia, ¿no?!
Ahora, lo que me confunde es que hay tipos que pasan todo el día haciendo esto. Imagina, se quedan allí metiendo datos en una máquina para ver qué frase sale del otro lado. Y dicen que esto es importante para las criptomonedas y no sé qué. ¡Yo creo que deberían conseguir un trabajo de verdad!
Pero bueno, parece que esto es muy importante para mantener las cosas seguras en internet. Es como si fuera una especie de código secreto que solo se puede hacer en un sentido. Tú puedes crear el código, pero luego no se puede volver atrás y descubrir lo que metiste. Al menos eso es lo que dicen, yo no he intentado.
Y mira que hay gente que gana la vida a costa de esto. Andan por ahí minando bitcoins, que es básicamente quedarse haciendo cuentas hasta dar con un número mágico. Gastan fortunas en electricidad solo para tener la suerte de encontrar ese número. Si quieres que te diga, ¡creo que sería más fácil jugar en el euromillones!
Pero bueno, tendrá su utilidad. Dicen que es bueno para guardar contraseñas y esas cosas. En lugar de guardar tu contraseña tal cual, solo guardan ese código raro que sale de la máquina de picar. Así, incluso si alguien se mete en sus ordenadores, no puede ver tu verdadera contraseña.
En el fondo, esto del hash es solo otra invención moderna que complica lo que era simple. Pero si los informáticos piensan que es bueno, ¿quién soy yo para decir lo contrario? Yo, por mi parte, me quedaré con mi cuadernito de contraseñas y dejo estas modernidades para quienes entienden del tema!
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Ó pá, déjame contarte una historia sobre esa cosa del hash que está dando que hablar. Mira, yo no entiendo mucho de esto de ordenadores y cosas así, pero por lo que me explicaron, el hash es como una especie de máquina de picar carne, ¿sabes? Metes dentro lo que quieras - puede ser un poquito de texto, un archivo grande, lo que sea - y siempre sale del mismo tamaño por fuera.
Es como si tomaras un libro entero y lo transformaras en una frase cortita. Y lo más curioso es que si cambias una coma en el texto original, ¡la frase que sale es completamente diferente! ¡Parece magia, ¿no?!
Ahora, lo que me confunde es que hay tipos que pasan todo el día haciendo esto. Imagina, se quedan allí metiendo datos en una máquina para ver qué frase sale del otro lado. Y dicen que esto es importante para las criptomonedas y no sé qué. ¡Yo creo que deberían conseguir un trabajo de verdad!
Pero bueno, parece que esto es muy importante para mantener las cosas seguras en internet. Es como si fuera una especie de código secreto que solo se puede hacer en un sentido. Tú puedes crear el código, pero luego no se puede volver atrás y descubrir lo que metiste. Al menos eso es lo que dicen, yo no he intentado.
Y mira que hay gente que gana la vida a costa de esto. Andan por ahí minando bitcoins, que es básicamente quedarse haciendo cuentas hasta dar con un número mágico. Gastan fortunas en electricidad solo para tener la suerte de encontrar ese número. Si quieres que te diga, ¡creo que sería más fácil jugar en el euromillones!
Pero bueno, tendrá su utilidad. Dicen que es bueno para guardar contraseñas y esas cosas. En lugar de guardar tu contraseña tal cual, solo guardan ese código raro que sale de la máquina de picar. Así, incluso si alguien se mete en sus ordenadores, no puede ver tu verdadera contraseña.
En el fondo, esto del hash es solo otra invención moderna que complica lo que era simple. Pero si los informáticos piensan que es bueno, ¿quién soy yo para decir lo contrario? Yo, por mi parte, me quedaré con mi cuadernito de contraseñas y dejo estas modernidades para quienes entienden del tema!