Si manejas una cuenta modesta, podrías estar cayendo en esta trampa: asumir riesgos excesivos y optar por transacciones que, por lo general, no ofrecen altas probabilidades de éxito. Es crucial entender que no todas las operaciones tienen el potencial de generar resultados óptimos. No obstante, existen estrategias de trading que te permiten inclinar la balanza a tu favor, incluso cuando no todos los resultados sean ideales (sabemos que las pérdidas son inevitables).
Nuestra percepción y nuestros conceptos preconcebidos sobre GANANCIAS Y PÉRDIDAS están frecuentemente DISTORSIONADOS por ideas GENERALIZADAS Y CONVENCIONALES sobre el ÉXITO Y EL FRACASO. Según los estudios de psicología de masas y finanzas conductuales, las personas suelen tener conceptos erróneos sobre estos dos aspectos: por ejemplo, ignorar el efecto de manada, es decir, seguir ciegamente las decisiones de otros sin realizar un análisis propio; sobreestimar la capacidad de predecir el mercado; aferrarse a inversiones perdedoras en lugar de limitar las pérdidas, lo que puede conducir a pérdidas aún mayores; confundir la suerte con la habilidad; permitir que las emociones dicten las decisiones; descuidar los fundamentos financieros; carecer de un plan de inversión claro; pasar por alto el impacto fiscal de las decisiones financieras, entre otros.
Entonces, ¿QUÉ SIGNIFICA PARA TI GANAR Y PERDER? Probablemente hayas pensado que ganar es aumentar tu capital y perder es disminuirlo. Sin embargo, cuando aplicamos estos conceptos al TRADING o a las inversiones, la realidad es mucho más compleja.
UN RECONOCIDO TRADER estuvo intentando generar ganancias durante más de un año con una estrategia que, según él, era ganadora debido a LAS ALTAS PROBABILIDADES DE OBTENER RESULTADOS POSITIVOS. Sin embargo, de 100 intentos, 95 RESULTARON EN PÉRDIDAS, y solo necesitó 5 aciertos para incrementar exponencialmente su capital.
Por lo tanto, en esta ocasión nos enfocaremos no en la frecuencia de tus pérdidas, sino en la magnitud de estas cuando ocurren, en cuánto ganas cuando aciertas, y en cómo establecer claramente estos ratios para mejorar tus resultados.
Te mostraré un método sencillo para establecer tu propio criterio de medición de pérdidas y ganancias en operaciones con criptomonedas.
¿Qué es el Ratio de Riesgo-Beneficio?
Se refiere a la proporción entre el monto que estás dispuesto a arriesgar (riesgo) y el monto que esperas obtener (beneficio) en una operación.
Antes de continuar, es fundamental que comprendas que para establecer un ratio de riesgo-beneficio adecuado, donde el beneficio justifique el riesgo asumido, es crucial determinar un PUNTO DE ENTRADA apropiado. Por ejemplo: Si divides una misma operación y la ejecutas en diferentes puntos con distintos objetivos de ganancia y niveles de riesgo. En este caso, si la primera entrada implica un riesgo mayor, el beneficio potencial también debería ser más elevado.
Si estás exponiendo 1$ pero el beneficio potencial es solo de 2$, ¿vale realmente la pena? Ahora bien, si arriesgas 1$ pero el beneficio potencial es de al menos 3$, la perspectiva cambia considerablemente al evaluar si el riesgo es justificable.
Por eso, tu punto de entrada determinará en gran medida si tu operación se desarrollará buscando tu mayor beneficio potencial, disminuyendo gradualmente en función de un menor riesgo.
En consecuencia, a medida que reduces tu exposición al riesgo, también disminuirá el valor de tu ganancia potencial o, en términos de plazos, mayor será el tiempo que deberás esperar para obtener un retorno atractivo (esto último aplicado más al contexto de las inversiones).
En el ámbito del trading, un ratio de riesgo-beneficio de 1:3 implica que estás dispuesto a arriesgar una unidad monetaria para obtener tres unidades de beneficio. Lo mismo se aplica al considerar ratios de 1:2, 1:5, etc.
Volviendo al ejemplo del trader que logró más ganancias con 5 operaciones positivas que pérdidas con 95 operaciones negativas, ¿cómo es esto posible? Te lo explico:
La clave está en la asimetría de las operaciones. Aunque las operaciones negativas resultan en pérdidas, la magnitud de estas pérdidas está limitada por el ratio riesgo-beneficio establecido. Por otro lado, las operaciones positivas, aunque menos frecuentes, generan ganancias que superan ampliamente las pérdidas acumuladas. Es como tener una serie de pequeñas pérdidas y un número reducido de grandes ganancias, lo que resulta en un balance global positivo.
Ilustración con Ethereum (ETH)
Imagina que estás considerando realizar una operación con Ethereum. Supongamos que el precio actual de ETH es de $2,000 por unidad. Deseas establecer un ratio de riesgo-beneficio de 1:3 en tu operación. Para lograr esto, primero debes determinar tu nivel de riesgo y establecer tus niveles de stop-loss y take-profit en consecuencia.
Stop-loss (SL): Si estás dispuesto a arriesgar $1 por unidad, y cuentas con $100, podrías adquirir aproximadamente 0.05 unidades de Ethereum (100 / 2000 = 0.05). Por lo tanto, tu stop-loss podría situarse alrededor de 0.05 unidades por debajo de tu punto de entrada.
Take-profit (TP): Con un ratio de riesgo-beneficio de 1:3, tu take-profit debería ser tres veces mayor que tu stop-loss. Si tu stop-loss está, por ejemplo, a $10 por debajo de tu punto de entrada, tu take-profit debería situarse a $30 por encima de tu punto de entrada.
Este ratio implica un sistema que, cuando gana, lo hace por el triple de lo que pierde cuando pierde, aunque esto no siempre es aplicable. Dependerá del porcentaje de aciertos que tenga tu sistema.
Y aquí es donde entra en juego la ESPERANZA MATEMÁTICA, que nos ayuda a evaluar si un sistema es rentable o no a largo plazo. En otras palabras, si podrás obtener un rendimiento positivo a largo plazo, independientemente del porcentaje de pérdidas (que es lo que logró el trader del ejemplo).
La fórmula se expresa así: (Porcentaje de operaciones ganadoras X ganancia media) - (Porcentaje de operaciones perdedoras X pérdida media). Esta fórmula nos proporciona una manera de evaluar nuestro sistema basándonos en los datos obtenidos de nuestras operaciones a largo plazo.
Por ejemplo, si de cada 10 operaciones 6 son positivas y 4 negativas, pero cuando ganas obtienes 10$ y cuando pierdes pierdes 20$, al aplicar estos datos a nuestra fórmula tendríamos:
Datos:
% operaciones ganadoras: 0.6 en decimales (60%)
Ganancia media: 10$
% de operaciones perdedoras: 0.4 en decimales (40%)
Pérdida media: 20$
EM=(0.6 x 10) - (0.4 x 20): -0.2
Como se deduce de este cálculo, estamos ante un sistema con esperanza matemática negativa, por lo tanto, no es viable operar con él.
De esta manera, el ratio de riesgo-beneficio no lo es todo dentro del sistema; forma parte de un conjunto más amplio, y para determinar si nuestro ratio es el adecuado, debemos recurrir a este tipo de HERRAMIENTAS para evaluar si nuestro sistema resulta beneficioso a largo plazo. (Puedes aplicar este análisis a tus operaciones del año 2023, lo que te ayudará a mejorar tu estrategia y comenzar este año con mejores perspectivas).
Así, es posible que tengas una asimetría en tus operaciones, es decir, que cada vez que pierdas, pierdas el doble pero no el triple (esto puedes ajustarlo modificando el tamaño de tu posición) y que cada vez que ganes, ganes el triple y no el doble. A largo plazo, y utilizando nuestra fórmula de EM, puedes comprender mejor qué estás haciendo bien o mal en términos numéricos.
Como sugiere un reconocido experto en trading, antes de realizar una inversión o un trade, pregúntate cuál podría ser tu ganancia real (o revisa tu esperanza matemática), porque no es lo mismo recibir por cada dólar o euro invertido el doble, que un premio valorado en 1000$. Nunca será equivalente invertir en una criptomoneda que ya ha alcanzado su máximo potencial que en una que, según tu análisis, podría tener altas probabilidades de generar mayores ganancias.
A partir de ahí, podrás determinar si vale la pena asumir el riesgo.
"El principal obstáculo del inversor, e incluso su peor enemigo, es probablemente él mismo." - Benjamin Graham
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Maximizando el Potencial: Más Allá de la Esperanza Matemática
ELEVANDO TU ESTRATEGIA AL SIGUIENTE NIVEL
Si manejas una cuenta modesta, podrías estar cayendo en esta trampa: asumir riesgos excesivos y optar por transacciones que, por lo general, no ofrecen altas probabilidades de éxito. Es crucial entender que no todas las operaciones tienen el potencial de generar resultados óptimos. No obstante, existen estrategias de trading que te permiten inclinar la balanza a tu favor, incluso cuando no todos los resultados sean ideales (sabemos que las pérdidas son inevitables).
Nuestra percepción y nuestros conceptos preconcebidos sobre GANANCIAS Y PÉRDIDAS están frecuentemente DISTORSIONADOS por ideas GENERALIZADAS Y CONVENCIONALES sobre el ÉXITO Y EL FRACASO. Según los estudios de psicología de masas y finanzas conductuales, las personas suelen tener conceptos erróneos sobre estos dos aspectos: por ejemplo, ignorar el efecto de manada, es decir, seguir ciegamente las decisiones de otros sin realizar un análisis propio; sobreestimar la capacidad de predecir el mercado; aferrarse a inversiones perdedoras en lugar de limitar las pérdidas, lo que puede conducir a pérdidas aún mayores; confundir la suerte con la habilidad; permitir que las emociones dicten las decisiones; descuidar los fundamentos financieros; carecer de un plan de inversión claro; pasar por alto el impacto fiscal de las decisiones financieras, entre otros.
Entonces, ¿QUÉ SIGNIFICA PARA TI GANAR Y PERDER? Probablemente hayas pensado que ganar es aumentar tu capital y perder es disminuirlo. Sin embargo, cuando aplicamos estos conceptos al TRADING o a las inversiones, la realidad es mucho más compleja.
UN RECONOCIDO TRADER estuvo intentando generar ganancias durante más de un año con una estrategia que, según él, era ganadora debido a LAS ALTAS PROBABILIDADES DE OBTENER RESULTADOS POSITIVOS. Sin embargo, de 100 intentos, 95 RESULTARON EN PÉRDIDAS, y solo necesitó 5 aciertos para incrementar exponencialmente su capital.
Por lo tanto, en esta ocasión nos enfocaremos no en la frecuencia de tus pérdidas, sino en la magnitud de estas cuando ocurren, en cuánto ganas cuando aciertas, y en cómo establecer claramente estos ratios para mejorar tus resultados.
Te mostraré un método sencillo para establecer tu propio criterio de medición de pérdidas y ganancias en operaciones con criptomonedas.
¿Qué es el Ratio de Riesgo-Beneficio?
Se refiere a la proporción entre el monto que estás dispuesto a arriesgar (riesgo) y el monto que esperas obtener (beneficio) en una operación.
Antes de continuar, es fundamental que comprendas que para establecer un ratio de riesgo-beneficio adecuado, donde el beneficio justifique el riesgo asumido, es crucial determinar un PUNTO DE ENTRADA apropiado. Por ejemplo: Si divides una misma operación y la ejecutas en diferentes puntos con distintos objetivos de ganancia y niveles de riesgo. En este caso, si la primera entrada implica un riesgo mayor, el beneficio potencial también debería ser más elevado.
Si estás exponiendo 1$ pero el beneficio potencial es solo de 2$, ¿vale realmente la pena? Ahora bien, si arriesgas 1$ pero el beneficio potencial es de al menos 3$, la perspectiva cambia considerablemente al evaluar si el riesgo es justificable.
Por eso, tu punto de entrada determinará en gran medida si tu operación se desarrollará buscando tu mayor beneficio potencial, disminuyendo gradualmente en función de un menor riesgo.
En consecuencia, a medida que reduces tu exposición al riesgo, también disminuirá el valor de tu ganancia potencial o, en términos de plazos, mayor será el tiempo que deberás esperar para obtener un retorno atractivo (esto último aplicado más al contexto de las inversiones).
En el ámbito del trading, un ratio de riesgo-beneficio de 1:3 implica que estás dispuesto a arriesgar una unidad monetaria para obtener tres unidades de beneficio. Lo mismo se aplica al considerar ratios de 1:2, 1:5, etc.
Volviendo al ejemplo del trader que logró más ganancias con 5 operaciones positivas que pérdidas con 95 operaciones negativas, ¿cómo es esto posible? Te lo explico:
La clave está en la asimetría de las operaciones. Aunque las operaciones negativas resultan en pérdidas, la magnitud de estas pérdidas está limitada por el ratio riesgo-beneficio establecido. Por otro lado, las operaciones positivas, aunque menos frecuentes, generan ganancias que superan ampliamente las pérdidas acumuladas. Es como tener una serie de pequeñas pérdidas y un número reducido de grandes ganancias, lo que resulta en un balance global positivo.
Ilustración con Ethereum (ETH)
Imagina que estás considerando realizar una operación con Ethereum. Supongamos que el precio actual de ETH es de $2,000 por unidad. Deseas establecer un ratio de riesgo-beneficio de 1:3 en tu operación. Para lograr esto, primero debes determinar tu nivel de riesgo y establecer tus niveles de stop-loss y take-profit en consecuencia.
Stop-loss (SL): Si estás dispuesto a arriesgar $1 por unidad, y cuentas con $100, podrías adquirir aproximadamente 0.05 unidades de Ethereum (100 / 2000 = 0.05). Por lo tanto, tu stop-loss podría situarse alrededor de 0.05 unidades por debajo de tu punto de entrada.
Take-profit (TP): Con un ratio de riesgo-beneficio de 1:3, tu take-profit debería ser tres veces mayor que tu stop-loss. Si tu stop-loss está, por ejemplo, a $10 por debajo de tu punto de entrada, tu take-profit debería situarse a $30 por encima de tu punto de entrada.
Este ratio implica un sistema que, cuando gana, lo hace por el triple de lo que pierde cuando pierde, aunque esto no siempre es aplicable. Dependerá del porcentaje de aciertos que tenga tu sistema.
Y aquí es donde entra en juego la ESPERANZA MATEMÁTICA, que nos ayuda a evaluar si un sistema es rentable o no a largo plazo. En otras palabras, si podrás obtener un rendimiento positivo a largo plazo, independientemente del porcentaje de pérdidas (que es lo que logró el trader del ejemplo).
La fórmula se expresa así: (Porcentaje de operaciones ganadoras X ganancia media) - (Porcentaje de operaciones perdedoras X pérdida media). Esta fórmula nos proporciona una manera de evaluar nuestro sistema basándonos en los datos obtenidos de nuestras operaciones a largo plazo.
Por ejemplo, si de cada 10 operaciones 6 son positivas y 4 negativas, pero cuando ganas obtienes 10$ y cuando pierdes pierdes 20$, al aplicar estos datos a nuestra fórmula tendríamos:
Datos:
% operaciones ganadoras: 0.6 en decimales (60%)
Ganancia media: 10$
% de operaciones perdedoras: 0.4 en decimales (40%)
Pérdida media: 20$
EM=(0.6 x 10) - (0.4 x 20): -0.2
Como se deduce de este cálculo, estamos ante un sistema con esperanza matemática negativa, por lo tanto, no es viable operar con él.
De esta manera, el ratio de riesgo-beneficio no lo es todo dentro del sistema; forma parte de un conjunto más amplio, y para determinar si nuestro ratio es el adecuado, debemos recurrir a este tipo de HERRAMIENTAS para evaluar si nuestro sistema resulta beneficioso a largo plazo. (Puedes aplicar este análisis a tus operaciones del año 2023, lo que te ayudará a mejorar tu estrategia y comenzar este año con mejores perspectivas).
Así, es posible que tengas una asimetría en tus operaciones, es decir, que cada vez que pierdas, pierdas el doble pero no el triple (esto puedes ajustarlo modificando el tamaño de tu posición) y que cada vez que ganes, ganes el triple y no el doble. A largo plazo, y utilizando nuestra fórmula de EM, puedes comprender mejor qué estás haciendo bien o mal en términos numéricos.
Como sugiere un reconocido experto en trading, antes de realizar una inversión o un trade, pregúntate cuál podría ser tu ganancia real (o revisa tu esperanza matemática), porque no es lo mismo recibir por cada dólar o euro invertido el doble, que un premio valorado en 1000$. Nunca será equivalente invertir en una criptomoneda que ya ha alcanzado su máximo potencial que en una que, según tu análisis, podría tener altas probabilidades de generar mayores ganancias.
A partir de ahí, podrás determinar si vale la pena asumir el riesgo.
"El principal obstáculo del inversor, e incluso su peor enemigo, es probablemente él mismo." - Benjamin Graham
Es tiempo de profundizar en el conocimiento.