La Saga Ripple-SEC: Una Mirada Interna a sus Últimas Maniobras Judiciales

He estado observando este circo legal entre Ripple y la SEC durante años, y honestamente, me estoy cansando de sus juegos. La última actualización de Filan muestra que ambas partes están tratando desesperadamente de evitar más litigios al renovar su solicitud de un fallo indicativo - después de que la Jueza Torres ya los rechazara una vez en mayo por ser "procedimentalmente impropio." Qué conveniente.

Ahora están presentando conjuntamente una solicitud para disolver la orden judicial y liberar la multa de $125 millones que está en custodia. Están alegando "circunstancias excepcionales" bajo las Reglas Federales 60(b)(6) y 62.1 - lo cual me parece un ejercicio legal acrobático. ¿Qué está pasando realmente? $50 millones irían a la SEC ( dinero de los contribuyentes para financiar más cacerías de brujas), mientras Ripple se lleva $75 millones. Buen trato para ellos, ¿no?

El exinsider de la SEC, Marc Fagel, reveló en X: "Tienen una apelación pendiente. El objetivo de esta moción es que las partes intenten evitar continuar con la apelación." ¡No es broma! Ambos están exhaustos y quieren salir de este lío que crearon.

Esta demanda ha estado prolongándose desde diciembre de 2020, cuando la SEC afirmó que Ripple realizó ventas no registradas de XRP por 1.3 mil millones de dólares. Ahora ambos están tratando de evitar otro año en los tribunales al descubrir repentinamente "cambios en las perspectivas regulatorias." Es curioso cómo la claridad regulatoria aparece cuando es conveniente para ambas partes.

Si este acuerdo es aprobado, los poseedores de XRP podrían finalmente ver algo de estabilidad, aunque no me haría muchas ilusiones. El mercado ya está reaccionando con XRP a $2.86, bajando un 0.92%. Esta saga ilustra perfectamente cómo la incertidumbre regulatoria puede mantener a un ecosistema de criptomonedas entero cautivo durante años.

Mirando atrás, no puedo evitar preguntarme cuánto se ha reprimido la innovación mientras estos gigantes legales jugaban sus costosos juegos en los tribunales de Manhattan.