El criterio de Kelly es una estrategia matemática que ha revolucionado el mundo de los juegos de azar y ahora intenta conquistar el cripto trading. He estado utilizando esta fórmula durante varios años y debo decirlo claramente: no funciona tan perfectamente como prometen los teóricos.
Esta fórmula sugiere calcular el tamaño óptimo de la posición para maximizar el capital a largo plazo. Suena tentador, ¿verdad? Pero en los volátiles mercados de criptomonedas, me he quemado más de una vez siguiendo ciegamente sus recomendaciones.
La fórmula parece simple: f* = (bp - q)/b, donde f es la participación de capital para la apuesta, p es la probabilidad de ganar, q es la probabilidad de perder, y b es el potencial coeficiente de ganancias. Pero, ¿de dónde obtener la probabilidad exacta de que Bitcoin o Ethereum crezcan? Ningún analista te dará cifras fiables en un mundo donde un tuit de Elon Musk puede hacer colapsar el mercado en minutos.
Kelly desarrolló su fórmula en 1956 mientras trabajaba en Bell Labs, pero fue Edward Thorp quien la popularizó aplicándola al blackjack. En los juegos de cartas se pueden calcular las probabilidades, ¿pero en las criptomonedas? ¡Es como adivinar en los posos de café!
He intentado usar un criterio en el comercio: los resultados han sido mixtos. Cuando el mercado está estable, la fórmula puede funcionar, pero en cuanto comienza la pánico o la euforia, cualquier cálculo se va al traste. Recuerdo que una vez la fórmula me recomendó invertir el 40% de mi capital en una altcoin prometedora, que dos días después cayó un 70%.
El principal problema del criterio de Kelly en las criptomonedas es la imposibilidad de determinar con precisión las probabilidades. Las manipulaciones del mercado, las noticias de los reguladores, los fallos técnicos, todo es impredecible. Algunos intercambios ofrecen herramientas basadas en este criterio, pero pensaría dos veces antes de confiarles mi dinero.
En comparación con el modelo de Black-Scholes, que al menos tiene en cuenta la volatilidad del mercado, el criterio de Kelly parece demasiado simplista para la complejidad de los mercados de criptomonedas.
Si aún decides usar esta fórmula, mi consejo es que reduzcas el tamaño de la apuesta recomendada al menos a la mitad. Es mejor subinvertir que perderlo todo en una sola operación fallida.
El criterio de Kelly puede ser una guía útil, pero no una píldora mágica. En el mundo de las criptomonedas, donde predominan las emociones y las manipulaciones, incluso los modelos matemáticos más elegantes a menudo se ven impotentes ante el caos.
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Criterio Kelly: ¿fórmula mágica o un engaño peligroso en el mundo de las criptomonedas?
El criterio de Kelly es una estrategia matemática que ha revolucionado el mundo de los juegos de azar y ahora intenta conquistar el cripto trading. He estado utilizando esta fórmula durante varios años y debo decirlo claramente: no funciona tan perfectamente como prometen los teóricos.
Esta fórmula sugiere calcular el tamaño óptimo de la posición para maximizar el capital a largo plazo. Suena tentador, ¿verdad? Pero en los volátiles mercados de criptomonedas, me he quemado más de una vez siguiendo ciegamente sus recomendaciones.
La fórmula parece simple: f* = (bp - q)/b, donde f es la participación de capital para la apuesta, p es la probabilidad de ganar, q es la probabilidad de perder, y b es el potencial coeficiente de ganancias. Pero, ¿de dónde obtener la probabilidad exacta de que Bitcoin o Ethereum crezcan? Ningún analista te dará cifras fiables en un mundo donde un tuit de Elon Musk puede hacer colapsar el mercado en minutos.
Kelly desarrolló su fórmula en 1956 mientras trabajaba en Bell Labs, pero fue Edward Thorp quien la popularizó aplicándola al blackjack. En los juegos de cartas se pueden calcular las probabilidades, ¿pero en las criptomonedas? ¡Es como adivinar en los posos de café!
He intentado usar un criterio en el comercio: los resultados han sido mixtos. Cuando el mercado está estable, la fórmula puede funcionar, pero en cuanto comienza la pánico o la euforia, cualquier cálculo se va al traste. Recuerdo que una vez la fórmula me recomendó invertir el 40% de mi capital en una altcoin prometedora, que dos días después cayó un 70%.
El principal problema del criterio de Kelly en las criptomonedas es la imposibilidad de determinar con precisión las probabilidades. Las manipulaciones del mercado, las noticias de los reguladores, los fallos técnicos, todo es impredecible. Algunos intercambios ofrecen herramientas basadas en este criterio, pero pensaría dos veces antes de confiarles mi dinero.
En comparación con el modelo de Black-Scholes, que al menos tiene en cuenta la volatilidad del mercado, el criterio de Kelly parece demasiado simplista para la complejidad de los mercados de criptomonedas.
Si aún decides usar esta fórmula, mi consejo es que reduzcas el tamaño de la apuesta recomendada al menos a la mitad. Es mejor subinvertir que perderlo todo en una sola operación fallida.
El criterio de Kelly puede ser una guía útil, pero no una píldora mágica. En el mundo de las criptomonedas, donde predominan las emociones y las manipulaciones, incluso los modelos matemáticos más elegantes a menudo se ven impotentes ante el caos.