Entre 2021 y 2022, el mercado DeFi vivió una oleada de airdrops y ofertas iniciales (IDOs). En septiembre de 2020, el protocolo de exchange descentralizado Uniswap distribuyó cerca de 6 430 millones de dólares en tokens UNI a través de un airdrop; en marzo de 2022, el proyecto ApeCoin lanzó tokens valorados en unos 354 millones de dólares. Estos grandes eventos de airdrop se consideraron hitos clave en el entorno cripto, fomentando la implicación de los usuarios y el entusiasmo de la comunidad. Al mismo tiempo, surgieron plataformas de IDO basadas en exchanges y comunidades (como BSCPad, DAO Maker, etc.), que aportaron multitud de oportunidades de inversión temprana. Con la llegada del mercado bajista en 2022, la actividad se redujo, pero en 2025 el “modelo de preventa” ha vuelto a cobrar protagonismo. Los analistas coinciden en que los inversores buscan activamente oportunidades de ‘participación temprana’ antes de las cotizaciones de los tokens, con la esperanza de intercambiar mayor riesgo por posibles retornos más elevados. De hecho, quienes acertaron entrando pronto en cada ciclo alcista a menudo obtuvieron rentabilidades sorprendentes: como afirma un comentario, «En cada gran mercado alcista, los pocos que accedieron inicialmente a través de preventas solían convertir pequeñas inversiones en fortunas transformadoras». Evidentemente, el “efecto early bird” de las preventas ha vuelto a centrar el interés inversor. En torno a este fenómeno, conviene plantearse dos cuestiones clave: ¿Por qué ha resurgido el modelo de preventa como tendencia destacada en el sector cripto? Y, frente al ciclo anterior, ¿cómo ha cambiado la lógica de inversión actual?

La preventa se refiere normalmente a la etapa en la que un proyecto recauda fondos de inversores antes de la cotización de su token, generalmente en formatos como ventas whitelist, fair launch, subastas (puja abierta) y precios dinámicos (como Bonding Curve).

El modelo de preventa ha atravesado varias etapas:
En 2025, las nuevas preventas presentan las siguientes características:
Aunque ambas son actividades tempranas de mercado, preventas y airdrops tienen objetivos y lógicas claramente diferentes:
En resumen, el mecanismo de preventa ha pasado de ser una herramienta especulativa a convertirse en una vía de financiación madura, priorizando la estructura de los fondos y el consenso comunitario. Las preventas eficaces no solo consideran la visión del proyecto, sino que deben acreditar avances de desarrollo y ecosistemas comunitarios sólidos para responder a la demanda de transparencia y valor a largo plazo de los inversores.
Durante el primer semestre de 2025, Bitcoin y Ethereum mostraron gran fortaleza, con precios al alza y en consolidación. Bitcoin superó los 100 000 dólares y alcanzó máximos históricos durante la consolidación, con un dominio de mercado del 62,1 %; Ethereum rebotó desde su mínimo anual de 1 853 dólares hasta 2 488, aunque aún por debajo de su precio de apertura de 3 337 dólares. Por el contrario, muchos activos digitales principales vieron sus márgenes de beneficio reducidos y aumentó la divergencia de mercado, mientras que las oportunidades DeFi tradicionales de alto rendimiento han ido desapareciendo. Como resultado, parte de la liquidez migró de grandes tokens consolidados (especialmente BTC/ETH) y estrategias DeFi de arbitraje hacia proyectos nuevos con mayor elasticidad.
En cuanto al comportamiento de los fondos, por un lado, los fondos estables se destinan a activos principales: hasta el tercer trimestre de 2025, los ETF relacionados con Bitcoin y Ethereum atrajeron más de 28 000 millones de dólares en flujos netos, lo que podría indicar una transición del trading especulativo a la asignación de activos. Por otro, ciertos fondos con mayor tolerancia al riesgo han comenzado a buscar oportunidades de arbitraje a corto plazo en proyectos de preventa. Varias nuevas cadenas y aplicaciones en preventa han captado decenas o cientos de millones de dólares; por ejemplo, el proyecto MegaETH recaudó casi 87,7 millones en una sola preventa. Estos fondos suelen preferir tokens de proyectos en fase de preventa (por los bajos descuentos y la alta elasticidad), esperando retornos elevados tras la cotización (arbitraje a corto plazo + elasticidad de precios). Además, la promoción por parte de líderes de opinión y el tráfico comunitario se han convertido en motores clave de las preventas: los equipos de proyecto atraen rápidamente la atención de “comunidades líquidas” mediante campañas con influencers y redes sociales, tareas de airdrop y convierten el tráfico minorista en fondos de suscripción.
Es importante destacar que la mentalidad inversora está cambiando: las ‘comunidades especulativas’ se transforman en ‘grupos de inversión estratégica’, y cada vez más inversores se centran en las hojas de ruta técnicas y la credibilidad del equipo, en lugar de depender únicamente del sentimiento de la comunidad. Esta evolución va en línea con la maduración del mercado y el avance regulatorio. En este contexto, las preventas de proyectos tempranos ofrecen una vía para capitales en búsqueda de nuevos focos de crecimiento: por un lado, abren ventanas de alto crecimiento; por otro, los participantes se centran más en el descubrimiento de valor y la gestión del riesgo, evitando seguir tendencias ciegamente. En conjunto, los datos de Launchpads activos muestran que el número de proyectos en preventa y los fondos recaudados en el primer semestre de 2025 aumentaron notablemente, y el ROI medio superó el rendimiento de los tokens principales en el mismo periodo (según CryptoRank y CoinGecko, el ROI de preventas exitosas suele multiplicarse varias veces). Aunque las tasas de retorno varían según la plataforma, los Launchpads de referencia (especialmente los que emplean IA para filtrar proyectos) han mantenido altos niveles de actividad y captación.

Fuente: https://www.plasma.to/?r=0
Fuente: https://www.plasma.to/?r=0
Plasma celebró dos rondas clave de preventa y venta pública de tokens. La primera fue una “ronda de participación mediante depósito”, en la que los usuarios debían depositar stablecoins como USDT y USDC en la Vault oficial para obtener el derecho a comprar XPL en el futuro. Esta ronda estaba limitada inicialmente a 250 millones de dólares, luego ampliada a 500 millones, pero superó los 1 000 millones en solo 30 minutos, reflejando un entusiasmo extremo. Los depósitos en esta fase no se intercambiaban directamente por XPL, sino que servían de base para calcular los activos que podrían retirarse tras el lanzamiento de la Beta de la mainnet. Posteriormente, Plasma realizó una venta pública oficial, vendiendo el 10 % del suministro total de tokens a unos 0,05 dólares por token, lo que suponía una valoración de 500 millones de dólares. El objetivo de captación era de 50 millones, pero las suscripciones alcanzaron cerca de 373 millones, resultando en una sobresuscripción significativa. Parte de los fondos de la venta pública se destinarán a incentivos del ecosistema de la mainnet y a reforzar la liquidez de stablecoins; los XPL para inversores no estadounidenses se desbloquearán al lanzarse la mainnet, mientras que los inversores estadounidenses afrontan un periodo de bloqueo de 12 meses. El entusiasmo en estas dos preventas no solo aportó financiación suficiente para el lanzamiento de Plasma, sino que también generó presión sobre la circulación y la gobernanza del mercado en fases posteriores.
Durante la venta pública de XPL, el objetivo inicial era recaudar unos 50 millones de dólares y valorar el proyecto en 500 millones. El volumen recaudado superó con creces las expectativas: se comprometieron unos 373 millones, más de 7 veces el objetivo. El token se vendió a unos 0,05 dólares por unidad, y el precio en cotización llegó a 1,7 dólares (a finales de octubre de 2025 había bajado a 0,5), lo que teóricamente proporcionó a los primeros participantes hasta 30 veces de rentabilidad sobre el papel. Además, PLASMA distribuyó casi 10 000 tokens XPL a cada suscriptor exitoso, lo que estimuló enormemente el interés de los usuarios por este tipo de proyectos de preventa con ahorro.

Fuente: https://www.megaeth.com/
MegaETH (token MEGA) se posiciona como una Layer-2 de alto rendimiento enfocada en la escalabilidad de Ethereum. El proyecto asegura que MegaETH cuenta con una arquitectura de red modular, con nodos secuenciadores y de prueba dedicados, para lograr un throughput de transacciones altísimo y baja latencia. Su objetivo es superar la barrera de las 100 000 TPS y ofrecer una experiencia de transacción casi en tiempo real.
Resultados de captación y asignación: Según datos de diversas fuentes, la venta pública de MegaETH concluyó en octubre de 2025 con resultados muy destacados. En la ronda pública se vendió alrededor del 5 % del suministro (unos 500 millones de MEGA), recaudando entre 50 y 450 millones de dólares, con cifras concretas que varían según la fuente.
Según The Block, el monto recaudado fue de 49,95 millones, mientras que CoinMarketCap y CoinDesk informaron de 450 millones, con varias veces la demanda esperada. Algunos medios incluso hablan de más de 1 000 millones en pujas, mostrando un entusiasmo de mercado inusual.
En cuanto a participación, las estadísticas oficiales y de terceros señalan que la subasta pública atrajo a más de 50 000 direcciones de wallet, con unas 5 000 finalmente asignadas, lo que supone una tasa de éxito de solo el 10 %. Según Bitget y ChainCatcher, el “fondo desbloqueado” recibió 49 976 solicitudes, pero solo 5 031 recibieron asignación. CoinDesk habla de 14 491 direcciones participantes, mientras que otras fuentes superan las 53 000, lo que refleja un entusiasmo extraordinario.
En resumen, la venta pública de MegaETH no solo es uno de los eventos de preventa de cadenas públicas de alto rendimiento más relevantes de 2025, sino que su sobresuscripción, baja tasa de asignación y objetivos técnicos ambiciosos han generado un debate generalizado en el sector. El mercado seguirá de cerca el ritmo de desbloqueo, la gestión de liquidez y el lanzamiento de la mainnet para comprobar si esta preventa cumple las promesas técnicas de “100 000 TPS y transacciones en tiempo real”.
Aunque el modelo de preventa ha recuperado protagonismo en 2025, los riesgos no pueden pasarse por alto. El principal conflicto en el mercado de preventas es la tensión entre la promesa de altos retornos tempranos y la brecha de confianza que genera la asimetría de información. En los últimos meses, varios rug pull han vuelto a lanzar la alerta.
El caso más reciente es el de Aqua en el ecosistema Solana. El 9 de septiembre de 2025, el analista en cadena ZachXBT denunció que Aqua podría haber realizado un rug pull, llevándose unos 21 770 SOL (unos 4,65 millones de dólares). Este proyecto había recibido el respaldo de socios como Meteora, Quill Audits, Helius, SYMMIO, Dialect, y fue promocionado por varios líderes de opinión, llegando a considerarse una promesa en Solana durante la preventa.
Tras el incidente, el equipo dividió los fondos en cuatro partes y los transfirió a exchanges centralizados mediante direcciones intermedias. Al mismo tiempo, la cuenta oficial de Aqua deshabilitó los comentarios y no ofreció respuesta pública. Esta actuación no solo provocó pérdidas a los inversores, sino que también desató un intenso debate comunitario sobre la eficacia de las auditorías en proyectos de preventa, la responsabilidad de los líderes de opinión y los estándares de due diligence de las Launchpads.
La importancia del caso Aqua reside en que pone de manifiesto la zona gris más peligrosa del mercado de preventas de 2025: cuando la ‘confianza’ es sustituida por el tráfico y el ‘respaldo’ se convierte en un mero instrumento de marketing, las supuestas “oportunidades tempranas” pueden convertirse muy fácilmente en riesgos sistémicos.
Este caso recuerda a los inversores que, por muchas auditorías y respaldos que reciba un proyecto, eso no sustituye el criterio propio sobre la transparencia de los flujos de fondos, la identidad pública del equipo y la lógica de los mecanismos de desbloqueo. De Aqua a otros proyectos fallidos, la burbuja de las preventas refleja la fragilidad de un mercado en rápida recuperación: crece el entusiasmo, pero el mecanismo de confianza no se ha reconstruido de verdad.
Mirando hacia delante, el modelo de preventa puede evolucionar combinando distintos mecanismos. Una tendencia es fusionar los Token Generation Events (TGE) con mecanismos de airdrop, formando un modelo híbrido de preventa online y captación de tráfico con airdrop. Por ejemplo, el proyecto Meteora de Solana llevó a cabo un airdrop y TGE simultáneos en el lanzamiento, liberando el 48 % del suministro total de forma inmediata y sin bloqueos, sustituyendo el desbloqueo lineal por incentivos comunitarios. Además, proyectos como BlockDAG han introducido “presale codes” (TGE Code), que permiten a los primeros participantes comprar a precios muy bajos y optar a airdrops, vinculando precio y derechos de airdrop y premiando así la lealtad temprana.
En materia de cumplimiento, los principales Launchpads y equipos de proyecto reforzarán los controles KYC y la custodia. Soluciones como Launchpad KYC de Blockpass facilitan el acceso a verificaciones globales de identidad, garantizando el cumplimiento de KYC/AML/CTF. Esta tendencia es visible bajo los marcos regulatorios de Europa, EE. UU. y Asia: Estados Unidos, la UE y Japón están impulsando la estandarización de las emisiones cripto, exigiendo divulgación de información y la incorporación de custodios o asesores de cumplimiento. En el futuro, veremos más emisiones cripto con auditorías previas, mecanismos de custodia de fondos e incluso autoridades regulatorias estableciendo normas de divulgación para proyectos tempranos, integrando la protección del inversor en el marco institucional.
Desde el punto de vista tecnológico, en el ámbito de las preventas se introducirán también herramientas innovadoras. Por ejemplo, los smart contracts de asignación dinámica pueden distribuir cuotas según el perfil del usuario y evitar sobresuscripciones desde una sola dirección; los sistemas de scoring crediticio en cadena, basados en el historial blockchain, pueden clasificar por riesgo a los usuarios whitelist; también podrían adoptarse mecanismos como Proof of Contribution, que vinculan la participación comunitaria y las contribuciones reales con el peso en la suscripción. En conjunto, las preventas seguirán siendo clave como canal de formación de capital en Web3, pero con medios más flexibles y mayor estandarización: a través de métodos de emisión diversificados, automatización por smart contract y avales de auditoría y cumplimiento, el mercado de preventas del próximo ciclo debería alcanzar un nuevo equilibrio entre captación de fondos y confianza. A largo plazo, tanto los equipos como los inversores se centrarán más en la creación de valor sostenible, siendo la madurez y solidez de las preventas como herramienta de canalización de fondos y validación de proyectos un factor decisivo para la evolución del ecosistema.
Si analizas el panorama de mercado actual, verás que existe una lógica profunda tras el resurgimiento de las preventas: con los activos principales moviéndose en niveles elevados, los fondos buscan nuevas oportunidades; a la vez, el avance de la tecnología blockchain y la evolución normativa abren más vías y escenarios de cumplimiento para los proyectos incipientes. Esta ola de preventas es tanto el resultado inevitable de la migración de liquidez como el producto de la evolución de la industria. Sin embargo, pase lo que pase con las tendencias, el núcleo de la inversión es siempre la búsqueda de valor y el control del riesgo. Los equipos deben ganarse la confianza con apertura y transparencia, y los inversores deben evitar trampas mediante investigación rigurosa y un juicio prudente.





